POR MOMENTOS

Llevo meses intentando recordar todo lo vivido, esforzandome cada día mas por conocer hasta el último detalle de todo lo acontecido como si dependiera mi futuro de ello. Y de repente, sin darme apenas cuenta, he comprendido que recuerdo lo suficiente para saber que aunque no sepa los detalles exactos, hay momentos que están grabados a fuego en mi memoria y que son los que me hacen sentir que mi paso por el mundo hasta el día de hoy, ha merecido mucho la pena.

Mi madre, con mi hermano en brazos sentada en un sillón de director.
Mi padre enseñandome palabras que a mi edad no debía saber.
Mis abuelos, y las frías noches comiendo patatas asadas en una estufa de carbón.
Mañanas de sábados cualquiera jugando a mil deportes en el colegio.
Aquel uniforme azul con esa pañoleta morada y blanca que mas tarde fue marrón y verde.
Tardes en el patio de mi abuela jugando al rescate, y a pi, y a bomba... esperando que llegara alguien de mi familia para correr y saltar en sus brazos a darles mil besos.
Mi primer día de instituto. Y mi vecina y amiga esperandome en el portal para ver que tal me fue el cambio radical.
Entrar en una tienda a comprarme un vestido y descubrir que no soy tan distinta que cuando tenia 4 años.
Mi primer concierto con bases... y desfases.
Cenas los viernes en el chino bebiendo chupitos sin coger el vaso con las manos.
Tardes en el mesenger hablando con quien no conocía y que sin saberlo me daría la vida.
Comilonas de pringles en tubos de hormigón. Empachos de panteras rosas tirada en el césped. Partidas de mus clandestinas en el porche del instituto.
Carreras por la ciudad domingos por la mañana de empalmada por llegar tarde al trabajo.
Cantar la canción de "Ingrata" a grito pelao dentro de un Ford de color verde, y adelantar autobuses de manera insensata.
Pies colganderos en alguna parada de autobús preguntando cosas extrañas a altas horas de la madrugada.
Los besiluces, las besiposas, los abrazos apretados y las caricias en el pelo.
Ese papel que me ofreció la oportunidad..."APTA". Y esos dejes extraños al hablar que me cercioran de que no fue un sueño.
Aquel beso a la salida de una estación de tren con mas vergüenza que frío.
La vez que me asomé a un ojo de buey y vi al niño de mis ojos, saliendo de ellos mil lágrimas de alegría.
Jueves de películas en versión original.
Despertarme con un beso y que lo primero que observara fuese esa mirada clara que me inspiraba una sonrisa.
El adiós a tiempo que me enseñó que valgo mas de lo que pensaba.
Los resultados de unos análisis que decían que todo estaba bien.
Las patadas y aumentos de tripillas de pequeños seres que me hacen sonreír.
El café que me decidí a tomar de nuevo después de años perdidos.
Conciertos y escapadas con personajes que usan solo un calcetín.
Abrir los ojos cada mañana, y sentir que cada día subo un escalón mas para llegar a la eternidad.
......
Quizá no tenga sentido ninguno, no tiene forma de historia, ni pretendo que la tenga ya. No se si recordaré algo mas que merezca la pena, pero se que tengo claro que jamás me volveré a olvidar de que mi vida, es maravillosa.